La educación como motor del cambio

Jhonny Ever Ramirez Villarroel es un joven de 27 años comprometido y muy activo. Tiene una paraparesia espástica y vive en el municipio de Sacaba con tres de sus siete hermanos, sus padres viven en Trópico.                                                            

Gracias a su determinación, no exenta de dificultades, logró graduarse de bachiller y ahora cursa la carrera de Trabajo Social en la Universidad Mayor de San Simón. También estudia contabilidad en el Centro de Educación Alternativa Santa María gracias al apoyo brindado con una beca por el proyecto INCREÍBLES.

A lo largo de su vida ha tenido que luchar contra diversas formas de discriminación. Fue excluido de entrevistas de trabajo debido a su discapacidad y a menudo fue objeto de burlas.          

En 2022, gracias a la colaboración entre la fundación EIFODEC y el Centro de Rehabilitación Integral de Sacaba, Jhonny entró en el proyecto INCREÍBLES.

Sus padres, a pesar de su preocupación por el estado de su hijo y la mirada crítica de la sociedad, siempre le han apoyado en todos sus proyectos. Al principio, Jhonny dudaba de la idea de participar en el proyecto. Estaba convencido de que había personas que tenían más derecho que él a recibir esa ayuda. Ahora está muy contento de formar parte del proyecto INCREÍBLES y se ha dado cuenta de todo lo que puede conseguir, a pesar de su discapacidad.

En el futuro, le gustaría licenciarse y encontrar un trabajo para que la sociedad le reconozca no por su discapacidad, sino por su compromiso y sus capacidades reales. Además, dando rienda suelta a su pasión por los libros, le gustaría escribir su propio libro de temática sobre discapacidad y ayudar a las personas con discapacidad a identificar y perseguir objetivos vitales que puedan hacerles felices. Cree firmemente en el valor de la autonomía porque piensa que sólo a través de la independencia puede uno alcanzar la plena madurez, convertirse en miembro activo de la comunidad y contribuir a reforzar su autoestima.